Cuando un cliente llega a mi oficina solicitando apoyo legal en temas de familia, mi primera acción es recibirlo bajo una mirada holística como ser humano para diseñar un apoyo integral. Porque quien está sentado frente a mi no solo trae la situación familiar a resolver, además viene con una carga emocional intrínseca, expectativas, valores y creencias, por mencionar algunas, que no pueden dejarse colgadas como el abrigo antes de entrar a la oficina.
A continuación comparto una publicación referida al ejercicio de la abogacía holística y consciente.
Ir a la pubicación